Los delincuentes se ceban con "La Casa del Arbol" de Valdepeñas

Actualizado 15.02.2024

Valdepeñas no es una ciudad precisamente afectada por la delincuencia. El buen trabajo de prevención de nuestros agentes de la Policía Local y del Cuerpo Nacional de Policia hace de Valdepeñas un lugar seguro, pero como en todos los sitios tranquilos, Valdepeñas también tiene sus amigos de lo ajeno, que en esta ocasión, demuestran además no ser muy espabilados.

“La Casa del Árbol” es un negocio situado en el Centro Comercial, junto a los Multi Cines. Si los ladrones siempre suponen un problema, cuando tienen la obsesión de convertir en el objetivo de sus fechorías a un centro de ocio y desarrollo infantil en el que sus trabajadores se esfuerzan por ayudar a los más pequeños, afecta más de lo normal.

No es la primera vez que les roban. De hecho no hace mucho sufrieron un robo parecido. Esta vez los delincuentes se han tomado su tiempo, han golpeado con herramientas pesadas durante un buen rato los cristales de seguridad que protegen las instalaciones. A juzgar por el esfuerzo y el tiempo que le han dedicado al magistral golpe, cualquiera pensaría que se han llevado una fortuna, pero no. Cuando decimos que los ladrones no eran muy listos no era un insulto, no lo decimos por menospreciar a los “presuntos” culpables. Culpables serán presuntos, pero tontos, lo que se dice tontos, son   tontos con condena. El objetivo de su hazaña era una de esas máquinas que dejan caer bolas con juguetes, a cambio de una moneda de 1 euro. En una buena semana , uns de esas máquinas podría dar un máximo de 100 euros, excaso botín para tanto trabajo.

El suceso tuvo lugar en la madrugada del pasado jueves. Los delincuentes golpearon durante mucho tiempo los cristales que protegen el establecimiento con todo tipo de objetos pesados hasta conseguir romper el cristal y entrar al interior para llevarse el preciado botín.

Lo que está claro es el destrozo que han causado, para llevarse un montón de monedas que, con total seguridad, no llegaban al centenar. No merece la pena. No merece la pena que destrocéis los sueños de la buena gente, y os arriesguéis a una condena de cárcel por un botín de unas cuantas monedas de euro. Igual no lo sabéis, lumbreras, pero la pena, cuando hay fuerza, es idéntica, independientemente del botín.

Gracias a la colaboración ciudadana y a las grabaciones recogidas en el lugar y en establecimientos de la zona, la policía está tras la pista de la banda. Menuda banda.